El pasado mes de abril, pudimos disfrutar en Segóbriga, un año más, del espléndido Festival que se viene celebrando desde hace 30 años en su coqueto y acogedor teatro romano, ubicado en un bello paraje de la Alcarria conquense. Esta trigésima edición contó con una muy buena asistencia de alumnos y profesores de diferentes centros escolares de casi todas las Comunidades de España, así como de una buena representación de alumnos universitarios y, como en jornadas anteriores, de excelentes grupos de teatro, que hicieron las delicias de los espectadores.
La apertura del Festival fue el martes 16 de abril, a la que asistieron el Delegado de Gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, una representante de la Dirección de Cultura de esta misma Comunidad, el Diputado de Cultura de la Diputación de Cuenca, el Coordinador de Educación, Cultura y Deportes de Cuenca y la Alcaldesa de Saelices, a todos los cuales agradeció el Director del Festival, Aurelio Bermejo, su presencia allí y el gran apoyo que vienen prestando las instituciones castellano-manchegas, especialmente, la Diputación de Cuenca, a este evento cultural de gran valor educativo y el mejor, según él, referente cultural y educativo para los jóvenes estudiantes de nuestro país. A continuación, el grupo “In Albis Teatro”, del “IES Fuente Nueva” de Morón de la Frontera (Sevilla), representó, bajo un sol radiante, que se dejó notar prácticamente los cuatro días del Festival, Las Bacantes, de Eurípides, que fue seguida con atención por los jóvenes espectadores, que obsequiaron al final a los actores, por la excelente representación de la citada obra, con un largo y sonoro aplauso Este mismo grupo representó por la tarde, en un ambiente distendido por las características de la obra representada, Miles Gloriosus, de Plauto, consiguiendo crear una gran empatía y una cierta complicidad con los actores de los jóvenes espectadores, los cuales, al final de la representación, los aplaudieron también largamente y bailaron y corearon con ellos las canciones que habían sustentado ciertas escenas de la obra. Bastantes de ellos aprovecharon para hacerse fotografías con algunos de los integrantes del grupo, lo cual se repetiría en los días siguientes con actores de las demás obras.
Antes y después de las citadas representaciones, la mayoría de los grupos de alumnos que se dieron cita ese día en Segóbriga aprovecharon para visitar, acompañados de sus profesores, las ruinas del Parque Arqueológico de Segóbriga, uno de los mejores de su género en España por la cantidad y buen estado de conservación de sus monumentos romanos. Lo mismo hicieron, los demás días del Festival, muchos de los grupos de alumnos y profesores que asistieron a él.
El segundo día, el grupo “Selene”, del IES “Carlos III”, de Madrid, representó, como única obra programada ese día y con asistencia del Presidente del Consejo Escolar del Estado, D. Francisco Rupérez, Helena, de Eurípides, obra, a mi modesto entender, algo “extraña” por la trama de la misma, que, sin embargo alcanzó un gran nivel interpretativo, a pesar de la juventud de muchos de los actores integrantes del grupo, y una puesta en escena muy cuidada y vistosa, características éstas que definen especialmente, según dijo el Director del Festival en la presentación del citado grupo, tanto a éste como a “Helios Teatro”, dirigidos por el matrimonio J. Luis Navarro y Gemma López. Así lo apreciaron los espectadores, que brindaron al grupo y a sus directores un largo e intenso aplauso por la excelente puesta en escena de la obra.
El tercer día, para el que se había programado también una sola obra, el grupo “Mutatis Mutandis”, de Cuenca, que había representado anteriormente, con otro nombre, algunas obras de teatro español, se estrenó en Segóbriga con una obra de unas características muy diferentes a éstas, como fue Los Gemelos, de Plauto, cuya puesta en escena fue muy elogiada al final por el Director del Festival, que reconoció haberse visto sorprendido muy gratamente por el buen hacer del grupo y de su Director, en especial, y por haber sabido captar y plasmar tan bien en la escena el espíritu plautino. Todos los actores rayaron a un gran nivel en sus respectivos papeles, como se pudo apreciar al final por los aplausos con que les obsequiaron los jóvenes y no tan jóvenes espectadores, que debieron de marchar de allí con la sensación de haber vivido una jornada estupenda de teatro, en un día climatológicamente hablando muy bueno también, en el incomparable marco del teatro romano de Segóbriga.
El viernes 19 de abril, último día del Festival, grupo “Helios Teatro”, de Madrid, representó, por la mañana, Hécuba, de Eurípides. La escenografía fue escueta, pero suficiente para situar perfectamente a los espectadores en los hechos narrados en la obra y en la época en que sucedieron: Una cabaña de tela, algunos ornamentos de la época; un escudo, un casco y una cabeza de madera, voluminosa, alusiva al famoso Caballo de Troya, y la puesta en escena, sencillamente genial, bajo mi criterio, y, para una de las profesoras asistentes a la misma, que tenía cerca, “de lo mejor que he visto nunca”, lo que hizo que los jóvenes espectadores siguieran, en muchos momentos la obra en un absoluto silencio. Si alguien me lo hubiera contado a mí, no me lo habría creído, sin haberlo visto antes. La ovación al final a los actores y a los directores fue, como cabe suponer, la más sonora y prolongada que recibieron los diferentes grupos participantes en el Festival.
Por la tarde, el grupo “Mutatis Mutandis”, de Cuenca, volvió a reponer Los Gemelos, de Plauto con el mismo acierto y solvencia que el día anterior, poniéndose así un bello broche de oro a las Jornadas de Teatro de Segóbriga destinadas especialmente a los alumnos y profesores de nuestro país.
Y estas serían mis vivencias e impresiones habidas en Segóbriga en su XXX Festival de Teatro Grecolatino, al que, en principio, acudía como voluntario -junto con otros compañeros del Campus de Cuenca, cuya aportación, por cierto, en el desarrollo y buena marcha del mismo fue muy elogiada y agradecida por el Director del Festival-, pero, al comprobar el gran nivel y las características tan peculiares del mismo, me sentí desde el primer día como obligado a ofrecer después, aunque fuera de una manera muy sucinta, la pertinente información y valoración de él, ilustrada con algunas de las muchas fotografías (haz clic aquí) que hice de los diferentes grupos actuantes.
Raúl de Paz Solís.
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